SOMOS LLAMADOS A LAS BODAS DEL HIJO DEL REY

Iglesia alguna vez has sido invitado a una boda, creo que si, quizás algunos de nosotros fuimos los anfitriones en ella y los protagonistas principales; a esta  boda a la que hemos sido invitados es una muy especial para la cual se han invitado a muchos pero pocos piensan asistir.

El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo; y envió a sus siervos a llamar a los convidados a las bodas; mas éstos no quisieron venir

Mateo 22: 2-3

 

Ya sé que conoces esta parábola en ella dice que los invitados lo rechazaron y no quisieron participar, podríamos decir que Nuestro Señor invito primeramente a los de su casa pero estos no quisieron y ahora nos están invitando a ti y a mí que no somos judíos de nacimiento pero somos llamados  sus hijos.

Volvió a enviar otros siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, he preparado mi comida; mis toros y animales engordados han sido muertos, y todo está dispuesto; venid a las bodas.

Mateo  22:4

 

Nos ha dado tantas oportunidades para que podamos asistir, pero nosotros en lugar de prepararnos para esta boda, estamos más bien afanados en nuestras actividades que estamos dejando atrás nuestra vida espiritual y sin pensarlo de pronto nos hemos cargado de afanes que estos nos están apartando como invitados.

Pero levantándose Pedro, corrió al sepulcro; y cuando miró dentro, vio los lienzos solos, y se fue a casa maravillándose de lo que había sucedido.

Lucas 24: 12

 

Y por más que nos está hablando y pidiendo que quitemos aquello que está en nuestro corazón que es pecado delante de Él y se ha convertido en nuestra piedra de tropiezo, seguimos sin obedecer y siendo llevados tras nuestros deseo y concupiscencia tras las tradiciones del mundo.

Mas ellos, sin hacer caso, se fueron, uno a su labranza, y otro a sus negocios; y otros, tomando a los siervos, los afrentaron y los mataron.

Mateo  22:5-6

 

El juicio está por comenzar el Padre de la novia está enojado porque los invitados no quieren obedecer y limpiarse de toda maldad y se ha llenado de indignación.

Al oírlo el rey, se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos homicidas, y quemó su ciudad.

Mateo  22: 7

 

Tú y yo como convidados nos pide que nos vistamos de acuerdo a la ocasión, cuando vamos a alguna fiesta nos vestimos con lo mejor que tenemos en el guardarropa, el único que tiene que estar vestido para la ocasión es nuestro corazón, porque un corazón arrepentido y humillado es lo que agrada a Dios, y cuando él lo escudriña y encuentra que no hay pecado, es Él mismo quien nos proporciona la ropa para la Boda.

Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies.

Lucas  15: 22

 

Hay de ti iglesia que al escudriñarte encuentre que no eres digno de estar en tal evento porque sigues guardando amarguras, idolatría, afanes, homicidios, adulterios, fornicaciones, etc, la palabra dice que serás echado fuera.

Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.

Mateo 25: 30

 

Si ya te llego la invitación para la boda, has como si fuera la boda de aquel familiar o amigo más querido y prepárate, quitando de tu corazón aquello que no te permite estar con las vestiduras blancas de lino fino la cual el mismo Padre pide a sus ángeles que te vistan, y hoy te ha pedido a ti que vengas a Él.

Y a la hora de la cena envió a su siervo a decir a los convidados: Venid, que ya todo está preparado.

Lucas  14: 17

 

Mas como todo caballero Él te deja a ti elegir si quieres  o no participar porque eres no solo un invitado sino eres la Novia.

El Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.

Apocalipsis  22:17

DIOS TE BENDIGA